En el post de hoy queremos explicar una de las terapias que se incluyen en la filosofía de trabajo de d´Harcourt Psicología, el TBE o la también llamada Terapia breve estretégica. Con el objetivo de que nuestros pacientes y/o consultantes puedan aclarar y entender como enfocamos el proceso terapéutico desde este punto de vista.
La terapia breve estratégica es, de forma muy resumida, aquella que mediante una serie de herramientas validadas científicamente pretende ayudar al paciente a que solucione sus problemas del presente sin extenderse demasiado en el tiempo ni recurrir a analizar causas del pasado.
Algunos de los puntos más importantes del TBE serían:
1- Cada terapia tiene que ser «original», lo que quiere decir que el terapeuta, como profesional, debe ser creativo e idear un método individualizado que a partir de técnicas más generales se adapte a las particularidades de cada individuo, dando así tratamiento personalizado.
2- El terapeuta tiene la misión de sintonizarse con el paciente y el proceso no debe ser al revés. Es el especialista quien tiene la tarea de lograr esa conexión.
3- La terapia se centra en la solución del problema y en el menor tiempo posible.
4- Da mayor relevancia a primero actuar y posteriormente, intervenir. Es decir, en las terapias clásicas primero se reflexiona y se modifica a nivel cognitivo para posteriormente trabajar o modificar a nivel conductual/comportamental. Sin embargo, en la TBE, se empieza por cambios en los actos, hábitos, modos de actuar…etc y después se reflexiona o debate sobre ello para un aprendizaje e interiorización. En d´Harcourt Psicología aplicamos la filosofía conjunta, lo que quiere decir que dependiendo del paciente, sus circunstancias, necesidades, habilidades o carencias empezaremos de uno u otro modo.
5- Importancia a centrarse en aquí y ahora, en el presente y no en el pasado.
6- Utilización de lenguaje persuasivo y adaptación de la comunicación al paciente, es decir, las mismas explicaciones dadas a personas diferentes han de ser comunicadas de forma diferente.
7- Imprescindible la existencia de prescripciones de comportamiento: Ejercicios, pautas, lecturas recomendadas, cambios de hábitos, reestructurar las relaciones…etc convirtiendo así la acción como elemento principal para generar cambios emocionales correctivos. En d´Harcourt Psicología no entenderíamos otra forma de encaminar la terapia, sino trabajando y reforzando todo lo aprendido y revisado en las sesiones con propuestas y prescripciones para que el paciente interiorice y generalice todo lo trabajado en consulta.
8- El objetivo de la intervención es modificar el sistema perceptivo-reactivo disfuncional del paciente que se mantiene vivo por los intentos previos y fallidos de solución puestos en práctica para resolver el problema. Es decir, la terapia se centra en cambiar la visión, enfoque, conocimiento del paciente y sus reacciones, hábitos, comportamientos, hábitos…etc, analizando clara y concretamente cuáles han sido sus intentos previos para solucionar la situación ya que esas «intentonas» mantienen y refuerzan el problema.
9- La TBE tiene claro que los procesos psicológicos tienen un sistema circular de funcionamiento, no líneal. Esto es, que a diferencia de otras terapias o tendencias se emplea un diagnóstico operativo, no explicativo o descriptivo, sino que pretende conocer el problema a tyravés del cambio primero y no a partir de teorías e identificación de causas y porqués